Comprar Té Matcha

El té matcha es un té verde molido que nació en China y se convirtió en una tradición ancestral en Japón. Japón perfeccionó su cultivo y preparación, convirtiendo al matcha japonés en el más prestigioso. Antes de la cosecha, las plantas se cultivan a la sombra durante varias semanas. Tras la cosecha, las hojas se lavan, se vaporizan, se secan, se eliminan impurezas, se cortan y se muelen hasta obtener un polvo fino y verde intenso.

Podríamos hacer una larga lista de propiedades y beneficios del té matcha, gracias a su alta concentración de componentes bioactivos como las catequinas, la teanina y la cafeína. Sin embargo, para ser breve, hemos hecho un resumen rápido de sus principales beneficios:

Los altos niveles de antioxidantes del matcha pueden ayudar a disminuir el estrés oxidativo, reducir la inflamación y mejorar la salud del corazón. El alto contenido de teanina, junto con la cafeína, puede mejorar la concentración y promover la función cognitiva. Esta combinación única también contribuye a su efecto estimulante de la energía. Después de beber té matcha, no experimentarás los efectos secundarios habituales del café, como nerviosismo y presión arterial alta. El impulso de energía es más constante en comparación con el café y puede durar hasta seis horas.

Otros beneficios incluyen fortalecer el sistema inmunológico y mantener bajo el azúcar en sangre y ayudar con la pérdida de peso.

Para la preparación del té matcha de forma informal y cotidiana (estilo Usucha):

1. Selecciona el té matcha: Para disfrutar de un delicioso matcha, te recomendamos elegir uno de grado ceremonial.
2. Prepara los utensilios: Antes de empezar a prepararlo, es importante que tengas todos los utensilios necesarios. Un bol, un Chashaku (cuchara de postre), un Chasen (batidor), un colador y un hervidor de agua.
3. Pesa el té matcha: Dos cucharadas con el Chashaku (una cuchara de postre). 1,5-2 gramos aproximadamente.
4. Tamiza el té matcha: Tamiza el matcha antes para evitar que se creen grumos.
5. Calienta el agua: Hierve agua y déjala enfriar ligeramente o ajusta la tetera a la temperatura de 70-80°C.
6. Mezcla el té matcha: Vierte un poco de agua en el bol (70 ml). Empieza mezclando despacio cerca del fondo con movimientos de ida y vuelta (forma de media luna) usando la muñeca con el Chasen (batidor), luego ve aumentando la velocidad con movimientos en forma de letra “M”. Una vez que se forme espuma, continúa batiendo mientras levantas el Chasen (o batidor) cerca de la superficie para romper las burbujas más grandes y uniformar la espuma.
   
   Para la preparación del té matcha con leche o matcha latte:
7. Sigue los mismos pasos de arriba (1 al 6).
8. Añade 150 ml de leche de vaca o bebida vegetal. Dependiendo de lo que te apetezca puedes añadirla caliente o fría.
   
   ¡Listo! Disfruta del té matcha de Tedelics.

¿Hoy en día quién no ha escuchado alguna vez hablar del té matcha? Aunque lo puedes encontrar en muchas tiendas no significa que tengan un buen producto. En Tedelics puedes comprar té matcha ceremonial y orgánico de Japón. Toda nuestra colección de matcha proviene de regiones prestigiosas que son reconocidas por producir té matcha japonés de alta calidad desde hace décadas.

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¡Un gramo de matcha tiene alrededor de 35 mg de cafeína (la cantidad de cafeína de un café, es de 80 mg), así que es ideal disfrutarlo durante la primera mitad del día! Lo bueno es que, gracias a la L-teanina, la cafeína del té matcha se libera poco a poco, manteniendo tu concentración de manera fluida.

No se recomienda consumir matcha con el estómago vacío o en ayunas, especialmente para quienes son nuevos en el matcha o tienen el estómago sensible, ya que su alto contenido de taninos puede causar molestias.

El té matcha es especialmente sensible a la luz y al calor, lo que puede hacerle perder sus propiedades. Por ello, debe conservarse en su envase original y guardado en un lugar oscuro y fresco. Si vas a consumirlo de manera diaria, no es necesario guardarlo en la nevera. Sin embargo, si lo consumes esporádicamente, es recomendable almacenarlo en la nevera, siempre bien tapado, para evitar que absorba olores de otros alimentos.